Empieza el año definiendo tus metas financieras.
Definir tus metas financieras requiere que revises tu presupuesto actual, hacer un análisis detallado, para ver que has logrado y que quieres mejorar, si no conseguiste alguna de tus metas deberías analizar, reflexionar y replantear nuevos objetivos que te ayudarán a tomar decisiones más acertadas.
Según Edwin Locke en su “Teoría del establecimiento de metas u objetivos” (1968) nos dice que la mejor meta, será la que se plantee como un desafío accesible, realista y posible.
Las metas deben ser realistas y accesibles.
Una meta debe funcionar como una guía y motivación que nos impulse hacia donde queremos llegar. Cuando nos fijamos metas alcanzables teniendo en cuenta nuestros recursos disponibles vamos a tener una mayor motivación.
Al querer alcanzar una meta debemos ser claros en lo que queremos.
Te daré un ejemplo, si tú dices:
“quiero ahorrar más este año” está bien, pero es necesario explicar cómo lo vas a hacer, esto debes especificarlo; “voy ahorrar el 10% de lo que gano mensualmente”, “voy ahorrar dejando de comprar por impulso”…etc.
así lograrás saber qué hacer y cómo hacerlo.
Mientras más específica sea tu meta más probabilidad tendrás de lograr tu cometido.
Las metas deben ser medibles y posibles.
Para que tu meta sea posible debes forzosamente hacer un plan, ser disciplinado y constante para llevarlo a cabo.
Sigamos con el ejemplo que tomamos anteriormente, “si vas a ahorrar el 10% mensual” entonces anota en tu presupuesto el nuevo porcentaje de ahorro que te has fijado o que cosas innecesarias puedes dejar de comprar…etc.
Toda meta u objetivo que te propongas debe ser cuantificable, así podrás medir tu avance periódicamente y saber cuánto vas avanzando.
Recuerda que toda meta que te fijes lleva una buena dosis de esfuerzo y trabajo.
Aprende a diferenciar los objetivos de las intenciones, la mayoría de las personas deja todo o casi todo en intenciones pero los que realmente se comprometen lo convierten en objetivos para llegar a la meta.
Toda meta debe tener un plazo.
Para alcanzar las metas que nos hemos propuesto es necesario determinar un plazo para ir cumpliendo cada objetivo, en este punto debes ser muy realista; puedes cumplirlas en un corto, mediano o largo plazo. Generalmente las metas a corto plazo son aquellas que nos ayudan a llegar a nuestra meta final.
“Una meta establecida en forma apropiada es el cincuenta porciento de lograrla.”
Zig Ziglar.